Beneficios de los rocódromos infantiles: aprender jugando

Beneficios de los rocódromos infantiles.

Que los niños son una fuente inagotable de energía es algo que no merece discusión. De hecho, su actividad diaria al margen de la propiamente escolar, está basada en continuos movimientos de saltos, giros, carreras… actividad física toda ella que emplean en sus ratos de juego. Pero si hay una actividad divertida, y en la que pueden dar rienda suelta a toda esa energía, es, sin lugar a dudas, la escalada. Para ello desde Urbe Adapta hemos diseñado unos rocódromos infantiles donde se combina diversión y actividad física a partes iguales.

Son unas instalaciones preparadas específicamente para practicar la escalada con el objeto de evitar el tener que desplazarse a la montaña. En Urbe Adapta construimos pequeños rocódromos con presas de escalada adaptadas a los niños y niñas que acudan, bien a un parque al aire libre o bien a un recinto cerrado, para disfrutar de este deporte. Disponemos de varios colores para su fabricación y con unas medidas de 1,6 metros en la base por 1,8 metros de altura. También aconsejamos tener prevista un área de seguridad de 5,6 metros a cada lado de la instalación que pueda proteger de caídas inesperadas.

Estos juegos para los más pequeños pretenden aportar beneficios tanto a nivel corporal, mejorando la actividad física, como en lo social ya que favorecen la relación con otros niños y niñas. También a nivel psicológico les aportan numerosas ventajas como el desarrollo de la personalidad.

 Concretamente éstos son los beneficios de los rocódromos infantiles:

     La práctica de este deporte ayuda a combatir el sedentarismo.

     Aporta un desarrollo mayor de la coordinación psicomotriz entre los ojos, los brazos y las piernas.

     Se mejora la lateralidad, la agilidad y el equilibrio.

     Se produce un desarrollo en la toma de decisiones ya que tienen que anticiparse a las situaciones que se suceden y avanzar de forma correcta.

     Ganan confianza en sí mismos según van viendo sus avances, favoreciendoles la autoestima y contribuyendo al aumento de la concentración y la atención.

     Les ayuda también a mejorar la flexibilidad y la resistencia por el tipo de ejercicio que realizan en la escalada.

     Con esta práctica combaten el estrés y mejoran la relajación.

     Si se practica en grupo, promueve la cooperación y la socialización entre los miembros del equipo.

     Desde Urbe Adapta y siempre que se pueda, recomendamos colocar nuestros rocódromos al aire libre ya que el contacto con el entorno es mayor y ayuda también a los niños y niñas a respetar el medio ambiente.

Ante cualquier duda sobre este tipo de juegos infantiles, consúltanos, nosotros te aconsejamos sobre lo más adecuado para tu espacio y necesidad.